El 28 de noviembre, Barcelona dio la bienvenida oficial a la temporada navideña con su tradicional encendido de luces. Pero este año, las cosas no salieron como muchos esperaban. El espectáculo previo al gran momento, titulado Solvern, dejó a la audiencia con cara de “¿qué acabo de ver?”.

La propuesta artística fue… peculiar, por decirlo de manera amable. Una danza reivindicativa que, según los organizadores, quería invitar a la reflexión sobre temas actuales. ¿El problema? Duró más de media hora y no tenía absolutamente nada que ver con la Navidad. Ni renos, ni villancicos, ni un mínimo rastro de espíritu navideño. Y claro, con un público que esperaba magia y tradición, las críticas no tardaron en llegar.

Twitter (y el resto de las redes) se llenó de comentarios desde “¿Quién aprobó esto?” hasta memes que comparaban el show con rituales de películas de terror. Sin embargo, una vez superada la confusión y las ganas de echarle tomates a la plaza, llegó el momento que todos esperaban: ¡el encendido!

Y aquí es donde la Navidad finalmente tomó el protagonismo. Con una breve pero efectiva muestra de luces láser, humo y unos toques de pirotecnia, Barcelona volvió a brillar. Porque, aunque el show previo dejó un mal sabor de boca a muchos, la magia navideña tiene la capacidad de borrar casi cualquier cosa (incluso media hora de danza extraña).

Así que, polémicas aparte, las calles de la ciudad ya lucen su traje de luces, listas para recibir a locales y turistas en una de las épocas más especiales del año. Si todavía no has paseado por el centro para admirarlas, ¿a qué esperas? ¡Es el momento perfecto para llenarte de espíritu navideño!

¿Qué te pareció el espectáculo de este año? ¿Te uniste al #TeamCringe o simplemente disfrutaste del momento? Déjanos tu opinión en los comentarios. ¡Nos leemos!